Tres simples pasos para una buena entrevista informativa previa a una de trabajo

Supongamos que te manejaste bien en el proceso de una entrevista informativa (o también llamado un coffee chat) y lograste organizar una reunión con un contacto increíble para que te cuente más sobre la empresa que te interesa. ¿Ahora que? ¿Cómo puedes aprovechar al máximo esta conversación, sin dejar de mantener las cosas informales y cómodas?. Como siempre, es solo cuestión de estar preparado. Aquí hay un proceso de tres partes para tu próxima reunión que asegurará que obtengas los consejos que necesitas y obvio causes una gran impresión.

Conversación inicial

A la gente le encanta hablar de sí mismos, así que cuando te sientes por primera vez, ¡déjalos! Inicia la conversación preguntándole a tu contacto algo sobre sus experiencias hasta el momento, algo que él o ella sepa todo. Algunos buenos lugares para comenzar:

¿Cómo te iniciaste en este campo?
¿Cómo es trabajar en tu empresa?
¿En qué proyectos estás trabajando ahora mismo?
¿Cuál es tu opinión sobre [algún desarrollo emocionante en la industria]?

También debes estar preparado para conversar sobre ti, tus experiencias pasadas y tus objetivos profesionales. Recuerda, esta reunión no es solo un momento para pedir consejo y aprender de las experiencias de tu contacto, también es una oportunidad para causar una buena impresión. Por ejemplo, no tengas miedo de comenzar tus preguntas con lo que ya sabes. Algo como, “Parece que los desarrollos recientes en el campo de la fisión nuclear van a ser bastante disruptivos para la industria energética. ¿Cómo cree que esto afectará a tu empresa? “

Obtén lo que quieres

Después de haber tenido una conversación general, es hora de pasar a lo que viniste a buscar: el consejo que no puedes obtener en ningún otro lugar.

Antes de la reunión, piensa en la información privilegiada que deseas aprender de esta persona. ¿Qué información buscas?, ¿hay algo que pueda aprender de esta persona que te resultaría difícil aprender por su cuenta? Dependiendo de dónde te encuentres en el proceso de búsqueda de trabajo, ajusta tus preguntas en consecuencia.

Por ejemplo, si todavía estás en modo de exploración, tratando de averiguar si, digamos, trabajar para una startup de tecnología educativa es para ti, entonces haz preguntas como:

¿Cómo eligiste esta empresa o puesto sobre otras en tu campo?
¿Qué es lo más gratificante de trabajar en esta industria? ¿El más desafiante?
Mi experiencia es en planificación urbana. ¿Cómo crees que puedo aprovechar mejor mi experiencia previa en este campo?

Si está más avanzado en su búsqueda de trabajo y te vendrían bien algunos consejos para buscar trabajo y entrevistas para empresas específicas, no temas hacer preguntas como:

Estoy esperando recibir noticias sobre entrevistas para los puestos disponibles que hay en la empresa. ¿Qué consejo me darías sobre la mejor manera de prepararse?
¿Qué experiencias, habilidades o rasgos de personalidad busca tu empresa en las nuevas contrataciones?
¿Qué te hubiera gustado haber hecho de manera diferente cuando comenzó en su empresa?
¿Qué consejo de búsqueda de empleo le darías a alguien en mi situación?

Por supuesto, querrás seguir el flujo de la conversación, estás tratando de construir una relación, no de hacer tantas preguntas como puedas. Recuerda también que lo que tienen en común estas preguntas es que todos buscan consejo. Déjalo de esa manera. No es ningún misterio que claramente estas buscando un nuevo puesto o cambio de carrera, y la forma más rápida de alienar a tu contacto es pedir un trabajo (o cualquier cosa por el estilo). Si tu contacto se ofrece a reenviar tu currículum en función de tu conversación, aprovecha por supuesto. Pero ese proceso lo debe iniciar él o ella, no usted.

Pide acceder a su red de conocidos

Dicho esto, al concluir la reunión, debes pedir recomendaciones para dos o tres personas más con las que sería bueno hablar mientras continúas trabajando en tu red. La probabilidad de que alguien se tome el tiempo para conversar contigo aumenta significativamente si tu solicitud inicial proviene de un contacto mutuo, por lo que es una manera rápida y fácil de hablar con más personas.

La clave aquí es hacer que tu solicitud sea lo más específica posible. Esto puede ser contrario a la intuición, pero en realidad hace que sea más fácil para tu contacto pensar en alguien cuando dices: “¿Podrías recomendarme a un par de personas más para que hable con ellas para aprender más sobre las oportunidades de salida después de una carrera en consultoría?” que dar una respuesta a: “¿Hay alguien más con quien me recomendarías que hable?”

En resumen: inicia la conversación, obtén lo que deseas obtener de la reunión y no te vayas sin saber con quién te comunicarás a continuación. ¡Y no olvides seguir con una nota de agradecimiento! Mejor aún, haga un seguimiento nuevamente con una actualización de tus reuniones con las personas que él o ella recomendó y los resultados de tu búsqueda de trabajo. Después de todo, tus entrevistados informativos no sólo son útiles por sus consejos únicos, sino que pueden convertirse a largo plazo en una parte de tu red.